Sarmiento entre su civilización y su barbarie.

Nacido el 15 de Febrero de 1811 en el Carrascal, Domingo Faustino Sarmiento fue criado bajo un ambiente no muy acomodado económicamente. Hijo de un hombre de changas y una ama de casa, crecido en el un entorno de 15 hermanos, Domingo siempre fue un fervoroso amante del estudio, optando asi por diferentes recursos además de la escuela para poder suministrarse asi mismo dosis y dosis de intelecto y raciocinio.

Sin embargo la historia cuenta una personalidad fuerte en Sarmiento, con una convicción que constantemente llevaba contradicciones. Aun es difícil explicar el por que de semejante ideología propuesta por este personaje histórico, que hoy en día se ve en sus discursos, cartas, y documentos escritos cierta similitud a las palabras dichas por el mismo Hitler en sus distintas campañas políticas, incluso mas directas, palabras frías que solo alguien con la misma mentalidad podría concebir correctas. Sin embargo en esta comparación, solo el segundo pudo poner en practica sus pensamientos.

El padre del Aula, como es llamado, creció en un ambiente en la que federales y unitarios se disputaban. A lo que lo llevó a escribir contra el Gobierno de Rosas. Y también contra Facundo Quiroga. Lo cual lo obligó a exiliarse en Chile. Desde allí, criticó duramente el gobierno Federal. También fue participe en varias batallas a favor de los unitarios bajo el comando del General Paz.

Una vez derrotadas las tropas unitarias, Sarmiento vuelve a Argentina en donde ejerce su vocación de maestro, inspector de escuelas, gobernador de San Juan y hasta Presidente de La Nación.

Detrás de toda una carrera servicial al País, Sarmiento guardaba, o mas bien dio a conocer su profundo desprecio hacia el “bárbaro”. Así llamaba el a los estratos sociales bajos: Gauchos, nativos y pobres.

Pero dejemos que el mismo se exprese:

“…los españoles. Estos hacían simplemente lo que todos los pueblos civilizados hacen con los salvajes: absorbe, destruye, extermina. Puede ser muy injusto exterminar salvajes, pero gracias a esta injusticia, la America esta hoy ocupada por la raza caucásica, la mas perfecta, la mas inteligente, la mas bella y la mas progresiva de las que pueblan en la tierra. Las razas fuertes exterminan a los débiles, los pueblos civilizados suplantan en la posesión de la tierra de los salvajes”

“Por los salvajes de América siento una invencible repugnancia sin poderlo remediar. Esa calaña no son más que unos indios asquerosos a quienes mandaría colgar ahora si reapareciesen. Lautaro y Caupolicán son unos indios piojosos, porque así son todos. Incapaces de progreso. Su exterminio es providencial y útil, sublime y grande. Se los debe exterminar sin ni siquiera perdonar al pequeño, que tiene ya el odio instintivo al hombre civilizado”

Si bien este hombre que amaba a su patria, y dio todo por ella. No tomo en cuenta a la gente pobladora como un todo conjunto, si no que por el contrario, dividió, educó y exterminó (o al menos estuvo a favor del exterminio).